“Yo soy más intuitiva, la vida me prepara y lo hago”
Por Rolando Gallego @rolandogallego
La emblemática actriz brasilera Sonia Braga estuvo en Argentina para acompañar el nacimiento del FICSUR, Festival de la Cinematografía mundial con eje en el Sur,
La protagonista de Aquarius (2016), de Kleber Mendonça Filho, y de piezas clave de la cinematografía mundial como “Doña Flor y sus dos maridos”, “Gabriela y El beso de la mujer araña”, dialogó amenamente con nosotros sobre sus personajes y el momento político de Brasil.
-¿Qué te dejó Clara (Aquarius) a vos?
Si corres un poco la pregunta cambia todo, pero Clara me dejó muchas cosas, al año de su participación en Cannes entré en un lugar en el que no me reconocía, porque Kleber estaba allá, y un grupo de personas de la película también, yo no pude, pero al año me di cuenta de todo lo que pasó y lo que hicimos juntos, como un nacimiento de verdad, por suerte, porque desde que leí el guión hasta hoy y todo lo que atravesamos, nacimos, crecimos juntos y me volví más brasileña que antes, aún más que antes, le he preguntado a Kleber por qué no nos conocimos antes, no sólo por lo que significó Clara para mí, sino para todos.
-¿Recuperaste Brasil para vos?
No recuperé, pasé a participar de un Brasil que viene de otro lugar, diverso, diferente, no sé cómo explicarlo, porque lo intento entender, en resumen, aprendí mucho, como mujer, actriz, ciudadana, conquisté amigos, espero que siga así, quiero trabajar con Kleber de nuevo, no para que me de otro personaje como Clara, sino para estar con el equipo y cómo trabajan.
-¿Fueron difíciles los ensayos?
No, no sé cómo explicarlos, yo le dije a él que no me gustaba ensayar, porque los actores van muy preparados y yo soy más intuitiva, la vida me prepara y lo hago, y lo hago porque estoy en la vida, es una manera diferente de verlo y de acercarse a esto, los actores tiene más coraje y yo soy más miedosa cuando voy a un ensayo. Después de Aquarius me da ganas ir a los ensayos, para entender y estar en la cabeza del director.
-Es imposible, y más de Kleber…
Una vez estaba caminando por un pasillo y estaba él y dijo “yo tengo algo en la cabeza para hacer, pero sólo está dentro de mi cabeza”, y cuando escuché eso me vi reflejada, mi hermana es más pragmática y le dije que era algo para mí lúdico. Lo que hace Kleber es increíble, piensa y ejecuta, y viniendo del mundo de la crítica la información que tiene es increíble, quisiera conocer más gente como él, no creo que haya muchas.
-Sos una suerte de embajadora del cine brasilero ¿Te gusta ese rol?
Pregúntales a los señores de Brasil por qué luego de tantos años de mi trabajo le dijeron a Kleber que no los representaba para ir al Oscar, ellos no pueden decidir, ellos a mí no me representan.
-Aquello que quisieron callar lo hicieron más grande aún…
No se puede explicar cómo toman decisiones tan erradas que no pueden luego cambiarlas. En toda mi vida jamás he hecho un trabajo que no venga de una verdad infinita porque sé qué hago y a quién represento, esto es así de toda mi vida, desde los nueve años que pienso así, vivir, pensar, hablar, y muchas veces me dijeron que no, pero yo seguí, ahora no hay una manera de hacerlo, pero hay que resistir.
-Qué es lo que hace Clara en toda la película…
Sí.
-¿Qué recordas de tu experiencia en Estados Unidos?
Yo no fui a la escuela, la dejé a los 14 y cuando fui allá era para hacer una película que finalmente no se dio, me quedé para estudiar inglés y después empezaron a llamarme, Robert Redford, Paul Mazursky, y otros, no sé porqué desde Brasil no me llamaban.
-¿Cuándo trabajarás aquí?
No sé, cuando me llamen, hace tiempo me contactó un director que me partió el corazón, pero no era el momento, he trabajado con actores y directores argentinos, e hice Testosterona (2003).
*Publicada originalmente en EscribiendoCine.
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